La revolución digital obliga a las universidades a reinventarse para mejorar el servicio a los estudiantes y ser más eficientes

La transformación digital ha afectado de diferente manera a las empresas. Hay organizaciones que han aprovechado esta transformación para nacer y crecer, como Amazon, Netflix, Coursera o diferentes empresas emergentes o startups. Pero hay un tipo de compañías que han tenido que reinventar su modelo adaptándose a las nuevas dinámicas digitales y sociales. Es el caso de las universidades, que deben aplicar nuevos modelos de gestión tecnológica que satisfagan las necesidades y servicios de los estudiantes y permitan una eficiencia administrativa.

Durante el primer día de reunión de la red de vicerrectores y responsables de administración y finanzas de las  38 universidades europeas y sudamericanas que forman parte del Centro Interamericano de Desarrollo (CINDA) -que se celebra en Barcelona entre el 17 y 19 de octubre- se reivindicó la necesidad de adaptar las nuevas dinámicas tecnológicas en la gestión universitaria. Esto implica grandes inversiones dentro de las organizaciones, un estudio del contexto universitario, gubernamental y social, hacer una implementación escalada y una construcción de forma conjunta con los implicados y, finalmente, una adecuada aplicación en la gestión del cambio. «Los nuevos proyectos y mejoras deben atender las necesidades de la organización desde su plan estratégico global. Para las universidades es prioritario adaptarse a las nuevas dinámicas y demandas tecnológicas», insistió Emili Rubio, vicegerente de Operaciones y director del Plan director de tecnología de la UOC.

Actualmente los vicerrectores de las grandes universidades de Colombia, Chile, Bolivia, Paraguay, Uruguay, Ecuador, Perú, Argentina, Brasil, Costa Rica, Santo Domingo y España ya están impulsando estos proyectos de tecnología. «Tenemos que cambiar y poder responder al nivel tecnológico que se exige actualmente», recalcó Alma Lucía Diazgranados, de la Universidad del Norte en Colombia. Diazgranados añadió que las principales barreras en los procesos de implementación digital son la falta de cultura, el desconocimiento y el bajo presupuesto, una tendencia general en las empresas de cualquier sector de índole no tecnológico.

En el estudio de Educause, publicado a inicios de este año, agrupa las diez estrategias y tendencias tecnológicas más importantes para las instituciones de educación superior, la mayoría incluidas en los nuevos planes de desarrollo digital de las universidades que forman parte del CINDA.

1. Uso de las API: interfaz de programación de aplicación.
2. Aulas de aprendizaje activo.
3. Incorporación de dispositivos móviles en la enseñanza y aprendizaje.
4. Aplicaciones móviles para usos institucionales.
5. Tecnologías para mejorar el análisis de los datos de los estudiantes.
6. Tecnologías para planificar y mapear los planes educativos de los estudiantes.
7. Centro de datos combinado en las instalaciones y basado en la nube.
8. Análisis predictivo para el éxito del estudiante (nivel institucional).
9. Cifrado de la base de datos.
10. Sistemas de planificación de éxito estudiantil.

Las universidades ya están implementando varias de estas acciones y la tendencia hacia la transformación digital es más evidente según el número de estudiantes, la maduración de la organización y el tamaño de gestión administrativa aseguraron los vicerrectores y responsables de administración y finanzas en el primer encuentro celebrado en Barcelona.

Entre los aspectos que más resaltan las instituciones de CINDA para que la implementación tecnológica sea un éxito están:

1. Contar con una política clara de tecnología en la organización
2. Alinear los planes estratégicos de toda la organización hacia un mismo objetivo.
3. Usabilidad y accesibilidad intuitiva de las herramientas creadas.
4. Liderazgo conjunto: construcción colectiva de los nuevos alineamientos tecnológicos.
5. Monitorear permanentemente las nuevas tendencias.
6. Dar especial importancia a la seguridad informática de todas las herramientas y utilización de datos.
7. Constante comunicación de los avances a todos los miembros de la organización.
8. Planeación estratégica aplicada a todos los proyectos.
9. Planes apropiados de gestión del cambio en la organización.