El objetivo era conocer el estado de desarrollo y uso de las tecnologías de la información y la comunicación dentro de la atención primaria. El estudio se ha hecho con una muestra representativa de médicos de treinta y un países.

Es difícil extraer conclusiones de ámbito europeo, dado que los estados son muy dispares entre sí. Hemos analizado los tres grandes pilares de las TIC sanitarias: el intercambio de información e historia clínica electrónica –lo que se conoce como HCE–, la telemedicina y las carpetas personales de salud. Por otro lado, la extensión de la historia clínica electrónica es muy alta a escala europea, pero el intercambio de información está a un nivel muy por debajo. Esto quiere decir que se utiliza la información pero se comparte poco.

El Estado español está muy por encima de la media en todos los parámetros. Pese a ello, se da una peculiaridad: se comparte mucha información entre centros del mismo sistema pero poca entre comunidades autónomas, por ejemplo. También se observa una correlación entre el acceso y el uso, puesto que los profesionales que tienen información disponible la usan. Así y todo el despliegue de estas tecnologías ha de ir asociado a un cambio organizativo y una reordenación de las tareas médicas. Así por ejemplo si no se establecen unos incentivos y una remuneración adecuada en nuevas tareas como la telemedicina, por ejemplo, los profesionales no acabarán de adoptarlas en su trabajo.