[Crónica de Núria Toril]
Nos encontramos en un momento en que el aprendizaje tiene un lugar central. Vivimos en la sociedad del conocimiento. La sociedad del siglo xxi es compleja y la educación tiene que ser más exigente para adaptarse a las necesidades sociales. La educación tiene que ir más allá del aprendizaje de contenidos. Hay que formar en competencias como la resolución de problemas, la creatividad, la capacidad de trabajar en equipo, la curiosidad, la innovación o la formación continua.
¿Por qué hay que apostar por los entornos de aprendizaje?
- El aprendizaje es un fenómeno de contextualización. Tenemos que alejarnos de la fragmentación de la educación y apostar por la educación desde un punto de vista holístico.
- Hay que aprovechar las potencialidades del entorno tecnológico.
- Cuando hablamos de entornos de aprendizaje no hablamos solo de instituciones escolares. Hablamos también de entornos no formales, informales o híbridos.
- Tenemos que ir más allá del marco de referencia vertical basado en sistema-escuela-clase-profesor-aprendiz porque es muy rígido, no favorece las alternativas innovadoras. Tenemos que apostar por la visión holística del aprendizaje.
El proyecto internacional Innovation learning enviroment
Ha analizado 125 casos innovadores de 25 países. Ya se han publicado los primeros resultados: The nature of learning. Using research to inspire practice. Las conclusiones principales sobre cómo debe ser la educación son:
- La educación tiene que ser central. Hay que fomentar el compromiso con el aprendizaje. El alumno tiene que ser consciente de que está aprendiendo.
- En la mayoría de ocasiones, el aprendizaje social y colaborativo es el más eficaz.
- Las emociones tienen un papel fundamental en la educación: disfrute, motivación, ansiedad, angustia, sentirse perdido. Para un aprendizaje eficaz es preciso que la gente se sienta motivada. Normalmente se trabaja más el desarrollo cognitivo que el emocional.
- Hay que ser sensible a las diferencias entre los aprendices. Es necesario tener en cuenta el trasfondo personal de cada aprendiz.
- Tenemos que exigir esfuerzos a los alumnos pero sin una presión excesiva que podría llevarles a sentirse perdidos.
- La evaluación es necesaria pero tiene que ser coherente con nuestros objetivos (en relación con los anteriores puntos). Además la evaluación tiene que incidir en el retorno de información formativo (evaluación crítica).
- Son necesarias las conexiones horizontales dentro y fuera del entorno educativo formal (conexiones con otros entornos formativos fuera de la escuela).
¿Cómo se conseguirán estos hitos?
- Debemos centrarnos en el alumno.
- Requiere un alto nivel de profesionalidad y liderazgo. Los ambientes de aprendizaje tienen que estar muy estructurados y diseñados.
- Los entornos tienen que ser inclusivos.
- El aprendizaje ha de ser social.
Hay que apostar por la innovación y por la investigación. Y es en el meso level o nivel intermedio (entre entornos) donde se pueden producir los cambios más importantes. Por este motivo tenemos que trabajar para crear conexiones entre entornos educativos, trabajar en red. Además hay que trabajar para que el entorno institucional no se contraponga a los entornos de aprendizaje.
Investigación de ámbito internacional
David Istance ha dirigido un equipo de investigadores de ámbito internacional para hacer una compilación del conocimiento existente sobre la naturaleza del aprendizaje (basado en los resultados de la investigación internacional desde la perspectiva cognitiva, emocional y biológica) y sobre determinadas aplicaciones educativas (el trabajo en grupo, las tecnologías, la evaluación formativa, el trabajo por proyectos y el aprendizaje en el entorno familiar y comunitario). El objetivo de este trabajo ha sido apuntar estrategias y propuestas para mejorar los entornos de aprendizaje: poner la investigación al servicio de la práctica.